El bruxismo es un problema que afecta cada día a más personas y se está convirtiendo en una molestia que mucha gente padece hasta sin saberlo. Despertarse con la mandíbula tensa, dolor de cabeza o los dientes pueden ser señales del bruxismo.
Este hábito involuntario de apretar o rechinar los dientes afecta a la salud bucal y a la calidad del sueño, y para evitarlo no solo necesitamos dispositivos como las férulas de descarga, también se puede aprender a cómo dormir para evitar el bruxismo.
¿Qué es exactamente el bruxismo?
Para aprender a cómo dormir para evitar el bruxismo debemos aprender qué es exactamente esta patología, que ocurre mientras dormimos y que es totalmente inconsciente.
El bruxismo es la acción repetitiva e involuntaria de rechinar y apretar los dientes y que puede ocurrir en cualquier momento del día, no solo por la noche. De hecho existen dos tipos de bruxismo:
- Bruxismo diurno: ocurre durante el día o cuando estamos despiertos y generalmente es una respuesta a momentos de estrés o de concentración.
- Bruxismo nocturno: si sufrimos este problema por la noche debemos aprender a cómo dormir para evitar el bruxismo para poder descansar y evitar los problemas que ocurren cuando estamos inconscientes. Si el bruxismo no se trata puede derivar en problemas en los dientes. problemas musculares en la zona mandibular y afectar de manera muy negativa al descanso.
Mejorar la postura para dormir
Para aprender a cómo dormir para evitar el bruxismo pasa por aprender a cómo dormir de una manera en la que puedas favorecer a la relajación de los músculos faciales y la mandíbula.
Dormir boca arriba
Esta es la mejor postura si hablamos de cómo dormir para evitar el bruxismo. Esta postura mantiene tu cabeza, cuello y columna alineados de forma natural, reduciendo la tensión en la mandíbula.
Si los músculos de la cara están totalmente relajados, no tienen la necesidad de contraerse y apretar los dientes durante la noche. Dormir boca arriba no solo es una buena manera de cómo dormir para evitar el bruxismo, sino que también facilita la respiración, que contribuye a un descanso más profundo y reparador.
Dormir boca abajo es contraproducente si buscas cómo dormir para evitar el bruxismo. Estas posturas pueden desalinear la mandíbula haciendo que los músculos trabajen más durante el sueño forzando a la mandíbula a una posición poco natural.
Colchones y almohadas también son importantes
Una buena almohada también es un elemento a tener en cuenta en la materia de cómo dormir para evitar el bruxismo.
- El uso de almohadas ortopédicas ayudan, gracias a su diseño, a mantener el cuello y la cabeza en una posición correcta que ayuda a mantener la relajación en los músculos de la cara y cuello.
- Si la almohada es demasiado baja o demasiado alta podemos desalinearnos tanto que favorecemos el rechinar y el apretamiento inconsciente de los músculos y dientes.
- Los colchones juegan también su rol en cómo dormir para evitar el bruxismo. Un colchón demasiado duro o demasiado blando puede afectar también al descanso y a la alineación de la mandíbula al dormir. Debemos preocuparnos en adquirir un colchón de buena calidad y que además nos mantenga en una postura cómoda, sin ejercer mucha presión en la espalda o que se hunda.
Hábitos que ayudan a prevenir el bruxismo
Para seguir con los consejos más útiles para aprender a cómo dormir para evitar el bruxismo, no debemos dejar pasar algunos hábitos que no ayudan a prepararnos para un buen descanso y un sueño de calidad. Relajarse antes de irse a dormir contribuye a bajar el estrés, una de las causas del bruxismo.
Evitar pantallas antes de ir a dormir
Si quieres saber una buena manera de cómo dormir para evitar el bruxismo piensa en olvidarte de las pantallas al menos una hora o dos antes de ir a dormir.
La costumbre de ver las redes sociales antes de dormir y el uso de tabletas y ordenadores estimulan el cerebro en vez de relajarnos, por culpa de la luz azul que estos dispositivos desprenden.
Al mantenerse activo hasta segundos antes de dormir, no permite que la mente se relaje y es más difícil desconectar, haciendo que el sueño sea menos profundo y el descanso mucho menor y de peor calidad.
Regula tu sueño
Es fundamental para mejorar cómo dormir para evitar el bruxismo que la rutina del sueño sea constante. Irse a dormir a la misma hora todos los días es muy beneficioso para el cuerpo, porque el ciclo de sueño se mantiene estable y así, nuestro sistema nervioso sabe cuando puede relajarse totalmente disminuyendo las tensiones musculares como las del bruxismo.
Limita el consumo de estimulantes
Para conseguir aprender a cómo dormir para evitar el bruxismo deberás dejar de tomar bebidas estimulantes por la tarde o por la noche, si es que tienes costumbre de hacerlo.
Las bebidas que contienen cafeína, afectan a los niveles de estrés provocando tensión en el cuerpo y favoreciendo el bruxismo
El alcohol puede parecer que nos relaja, pero en realidad interfiere en las capas más profundas del sueño, provocando episodios de bruxismo.
Un buen ambiente
Aprender a cómo dormir para evitar el bruxismo también trata de aprender a que un buen ambiente en tu habitación ayuda, y mucho.
Una temperatura agradable, un cuarto que esté totalmente a oscuras y un entorno sin ruido ayuda mucho a la relajación de mente y cuerpo y a la reducción de las tensiones musculares que causan el bruxismo.
Dispositivos para evitar el bruxismo
Si consultas con tu profesional dental sobre tu bruxismo es posible que pueda ayudarte con unos dispositivos para prevenirlo, como son las férulas de descarga..
Estos dispositivos se colocan en la boca antes de dormir y actúan como una barrera que evita que se froten entre sí. Se hacen a medida para cada paciente y se adaptan perfectamente a la boca resultando cómodos para poder dormir plácidamente con ellos.
Si el bruxismo provoca mucho dolor y en ocasiones se consideran también tratamientos médicos y farmacológicos, como los relajantes musculares, para ayudar al cuerpo a destensarse para reducir los episodios de bruxismo.